¿Te pasaste toda la noche estudiando y sentís que no lográs incorporar los conocimientos? Te compartimos algunos consejos que seguramente te ayudarán en tu aprendizaje:
1- Estudiá en tu horario ideal.
Hay quienes estudian mejor por la mañana, después de comer o por la noche. No te esfuerces en hacerlo en horarios que no te sirven. Una vez que definas cuál te conviene, podés crear tu rutina de estudio.
2 – Concentrate antes de estudiar.
Planificá cómo empezar y buscá el espacio más cómodo para hacerlo. Evitá distraerte con el entorno.
3 – Tené a mano lo necesario
Antes de comenzar, poné a tu lado todo aquello que te va a ser indispensable; por ejemplo: apuntes, materiales, etc. Posiblemente, si te levantás a buscar algo, terminarás distrayéndote fácilmente.
4 – Repasá lo que aprendiste hoy.
Procurá al llegar a tu casa, repasar lo aprendido en la materia. De esta manera, recordarás fácilmente los contenidos.
5 – Respetá los tiempos de tu cerebro.
No te fuerces en aprender cuando estás cansado, enojado o distraído. Aprendés mejor si estás relajado, de lo contrario, tu mente ignorará todo lo que querés aprender.
6 – Aplicá lo que estudiás a la vida cotiana.
Si le buscás una utilidad práctica a lo que acabás de aprender seguramente lo recordarás mejor.
7 – Buscá más información.
Herramientas como Internet son útiles para buscar información relacionada a lo que estás estudiando. Podés consultar videos o artículos que refuercen los contenidos.
8 – Relajate antes de un examen.
Una noche antes, lo ideal es despejarte así preparás tu mente para recordar todo lo aprendido con facilidad.